Hoy en la Buhardilla vamos a ver como podemos construirnos un sistema de cultivo hidropónico vertical. En entradas anteriores ya comentamos en que consistían los cultivos hidropónicos y sus principales ventajas frente al cultivo en tierra. A pesar de que estos sistemas puedan parecer que son muy complicados de manejar o de montar, la verdad es que se pueden montar equipos perfectamente funcionales con materiales que podemos encontrar fácilmente en cualquier ferretería. La principal ventaja de los sistemas verticales es que estos aprovechan mucho mejor el espacio del que disponemos, lo que nos va a permitir tener más plantas en el mismo espacio, consiguiendo así aumentar el rendimiento de nuestra área de cultivo. Sin más dilaciones empecemos.
Material
- Tubo PVC DN110
- Caja de plástico
- Tapas para tubo de DN110
- Sierra
- Decapador o fuente de aire caliente
- Cestas de cultivo
- Trapo húmedo
- Pieza de madera circular
- Bomba de agua
- Tubo de riego
Lo primero que tenemos que hacer es marcar los puntos en los que vamos a colocar cada una de nuestras cestas de cultivo. Como regla general podemos hacer los cortes a una distancia de 4 cm entre ellos y también los vamos a hacer descentrados, de este modo podemos poner más cestas por tubo. En este caso mi recomendación es que la altura del tubo no sobrepase el metro de altura, puesto que si aumentamos el tamaño vamos a tener que utilizar una bomba muy potente para poder llevar el agua hasta la parte superior de la torre. También es importante remarcar que en la parte inferior del tubo, la parte que va dentro de la caja no vamos a hacer ningún corte, en vez de eso haremos algunos agujeros con un taladro para favorecer que el agua salga del tubo y se mezcle de nuevo con el agua del tanque.
Una vez realizado los cortes viene la parte crítica del proceso, con el decapador o algún equipo que genere aire caliente, vamos a calentar la parte del corte hasta que este empieza a perder su dureza y se vuelva un poco flexible, en este momento vamos a introducir la pieza de madera envuelta en el trapo húmedo, lo que hará que se deforme el plástico dando lugar a una cavidad en la que podremos poner la cesta de cultivo. Mantendremos la pieza con el trapo unos segundos, hasta que el plástico se vuelva a enfriar. Repetimos para cada uno de los cortes.
Ahora que ya tenemos las torres preparadas es momento de preparar el tanque de agua, para ello vamos a poner los tubos encima de la tapa y vamos a marcar el perímetro del tubo con un rotulador, para a continuación cortar la circunferencia que hemos hecho. A continuación vamos a hacer los agujeros por donde va a salir el tubo de riego, el cual va a subir hasta la parte alta de la torre de cultivo, donde practicaremos una pequeña inserción para introducir la parte final del tubo de riego y de esta manera conseguir que el agua caiga de la parte alta de la torre hasta el tanque de nuevo, humedeciendo las cestas de cultivo en el proceso y permitiendo así que les plantas crezcan. Para permitir una mejor distribución del agua es posible poner algún tipo de aspersor al final del tubo, pero esta parte es plenamente opcional y el resultado final no va a depender de ello.
Como hemos visto es muy fácil y económico construirnos nuestro propio sistema hidropónico en casa y poder así disfrutar de plantas aromáticas o verduras frescas cultivadas por nosotros mismos sin necesidad de tener un terreno o huerto.
Hasta la próxima aventura!!!
La Buhardilla del Alquimista 